Casa de la Mujer

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Asociación de Mujeres Generaleñas


Fundada en 1998.

 

¿QUÉ ES LA CASA DE LA MUJER?

 

La Casa de la Mujer es un espacio fundamental para el trabajo multidisciplinario, que logra dar una respuesta positiva y oportuna a las mujeres organizadas que luchan por su desarrollo integral dentro de la sociedad y una oportunidad para las Instituciones gubernamentales y autónomas que deseen canalizar a través de esta organización, su tarea de acción social en el cantón de Pérez Zeledón.

 

La Casa de la Mujer se proyecta a partir de la necesidad sentida por las mujeres Generaleñas de mejorar su calidad de vida y la de sus familias con el objetivo de promover su participación en las distintas actividades productivas y formativas para las cuales existan oportunidades.

 

Se trata de un proyecto dirigido al género femenino, por medio del cual se cuenta con una infraestructura destinada al estudio, la divulgación de toda la información existente sobre el tema y la promoción de la mujer como ente activo dentro de la sociedad.

 

Se propone la unión de esfuerzos entre la Asociación de Mujeres Generaleñas, Instituciones gubernamentales y otros organismos de la comunidad, para ejecutar el proyecto de construcción física y desarrollo permanente de actividades académicas dentro de la Casa de la Mujer, que respondan a los intereses para los que fue creada  mediante procesos de educación permanente y  proyectos de trabajo intelectual e Interinstitucional.  Con el fin de realizar una acción recíproca con el beneficio invaluable de superación individual para las mujeres y el núcleo familiar.

 

Resumen de situación socioeconómica de las personas atendidas en el Proyecto Intervención Psicoterapéutica a víctimas de violencia.

 

Casa de la Mujer 2010.

 

De las 150 solicitudes recibidas durante lo que va del año 2010 para formar parte del Proceso Psicoterapéutico “Reconstruyendo mi vida”, dirigido a mujeres adultas víctimas y/o sobrevivientes de la violencia doméstica, se puede determinar que el 95% son mujeres de bajos recursos económicos, con una escolaridad mínima (en algunos casos sin saber leer y escribir).

 

Por otra parte, existe un buen grupo de mujeres que indica haber solicitado ayuda en IMAS, apoyadas en su condición de jefas de hogar, encargadas no sólo del sustento para sus hijos e hijas, sino también de la educación de los mismos, teniendo que asumir y afrontar gastos básicos, además de pagar alquiler  por un techo para ellas y sus hijos (as), debido a que no cuentan con un lotecito para solicitar el bono de vivienda.

 

La situación apremiante, en la mayoría de los casos se debe a sus limitadas posibilidades de conseguir un empleo que les garantice salir adelante económicamente; de lo contrario, estas señoras se comprometen con ellas mismas para continuar unidas a sus parejas o esposos (de los cuales son agredidas y maltratadas física, psicológica y sexualmente), de lo contrario no podrían mantenerse solas.

 

De contar con un subsidio, beca o colaboración para estas mujeres, la situación podría ser transformada positivamente, ya que con las herramientas y los recursos necesarios, se puede lograr la capacitación formal y no formal, que les augure en un futuro próximo, independizarse de la persona que las agrede y/o maltrata, y de esta manera romper con la violencia que han vivido por muchos años.

 

Lic. Priscila Alfaro Campos, Promotora del Proyecto.